viernes, 22 de enero de 2010

Lucila Luciani de Pérez, Primera mujer en la Academia Nacional de la Historia

Eumenes Fuguet Borregales (*)
Extraordinaria dama, digna representante del gentilicio marabino, nace el 21 de enero de 1881 del matrimonio de Don Juan Nepomuceno Luciani y Casimira Eduardo. En su dilatada vida, Doña Lucila logra destacar por sus exhaustivos estudios históricos, brillantes ensayos, conocimientos de música y pintura, y sobre todo por su activa participación en luchas sociales que le permiten iniciar el movimiento feminista de Venezuela. Su amplísima cultura se nutre con sus provechosos viajes hacia Europa, Norteamérica y países hispanoamericanos. Residenciada en Caracas, su vehemente pasión por la música crece al ser instruida por los mejores profesores de la época, especialmente de piano y violín; de estos, el afamado Ramón Delgado Palacios le brinda la oportunidad de presentarse en conciertos privados y públicos, donde demuestra habilidad y conocimientos. En 1909 casa con el reconocido médico Manuel Pérez Díaz (1872-1931), pionero de los estudios sobre dermatología en nuestro país. La gran pasión de Lucila por la historia universal e investigación científica, se convierten en valioso apoyo para ingresar a la Academia Nacional de la Historia, el 28 de abril de 1940, cargo que asume en regio acto el 5 de junio. Luego de su discurso, inspirado en los postulados del generalísimo Francisco de Miranda, donde expresara con profundidad y estilo, la igualdad de la mujer en aspectos social, cultural y oficial, se convierte en la Primera Mujer en ingresar en la Docta Corporación, ocupando el Sillón "X", vacante por la muerte del doctor Plácido Daniel Rodríguez Rivero. El discurso de bienvenida lo responde el doctor Juan José Mendoza, expresando honda satisfacción por el ingreso de la primera mujer que honraba un Sillón vacante; decisión que permitía vencer los abominables prejuicios manejados hasta el momento, y que logra proyectar la amplitud de la Academia Nacional de la Historia. El importante precedente, a su vez facilita el ingreso de la segunda venezolana a la Academia, representada por la doctora Ermita Troconis de Veracoechea, a quien se asigna el Sillón "Q", vacante por la muerte del ilustre doctor Cristóbal L. Mendoza (1886-1978); continuando en la incorporación de la mujer en tan notables posiciones, el 21 de junio del 2001 ingresa la doctora Nora Bustamante Luciani, docente, investigadora y acuciosa historiadora, sobrina de Doña Lucila. El matrimonio Pérez Luciani procreó a: Álvaro, Hernán, Vasco, Ramiro, Gonzalo, Lucy, Rodrigo y Alonso, digna descendencia parcialmente radicada en Valencia. Al enviudar en marzo de 1931, Doña Lucila debió realizar actividades educativas y culturales para alcanzar el sustento necesario para apoyar y proteger su numerosa progenie. De su extensa producción literaria, destacan: "La batalla de Boyacá", su importancia militar y política; "Seis Ensayos sobre Bolívar"; "La maravillosa historia de unos restos"; "El Caballero sin miedo y sin tacha"; "Miranda, su vida y su obra"; "Páginas sueltas", entre otras obras de magnífica producción, y profundas investigaciones sobre el proceso emancipador. Su dilatada trayectoria cultural, histórica y social le permiten ocupar relevantes cargos públicos y privados, pudiendo mencionarse: Primera Directora de la Escuela Normal de Maestras en 1936; Directora del conocido "Colegio Chávez" en Caracas; Bibliotecaria del Ministerio de Relaciones Exteriores; Subdirectora de la Biblioteca Nacional. De innumerables y prestigiosas comisiones, recordamos que Doña Lucila fue Delegada por Venezuela ante la Comisión Interamericana de Mujeres, -Washington, 1928-; Delegada por Venezuela al acto de Instalación de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Presidenta del Primer Congreso Católico Femenino de Venezuela, en 1941; en 1941 fue enviada por el gobierno nacional a la ciudad de San Francisco, en los Estados Unidos, como Consejera de la Delegación que representó a nuestro país en 1945. Sus aquilatados méritos le hicieron merecer la distinguida denominación Iniciadora del Movimiento Feminista en Venezuela. Nuestra prestigiosa dama, caracterizó luchas por la igualdad de la mujer, así como por la investigación y divulgación histórica. Hermana del doctor Domingo Luciani y del escritor Jorge Luciani, fallece en Caracas el 8 de marzo de 1971 a los ochenta y nueve años de edad, dejando un valioso legado de ensayos y monografías, afanosos trabajos investigativos que trazaron la senda para elevar el status de la mujer venezolana.

(*) Gral. de bgda
eumenes7@gmail.com

Diario El Carabobeño

Historia y Tradición

1 comentario:

  1. Lucila Luciani afirmó en "Maravillosa historia de unos restos" la imposibilidad de que los restos del gran mariscal Antonio José Sucre estuvieran en Ecuador y desglosa una serie de argumentos para desmentir esa falacia histórica que perdura hasta nuestros días,ya que los restos aun estarían en Colombia.

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